Estoy inevitablemente triste, mi compañero de aventuras de los últimos siete años ha decidido que era hora de descansar, ha roto el cable del disco duro que lo unía a la vida. No resistió los envistes de mi escritura, golpeaba tan fuerte sus teclas que terminó por caer exhausto, como esos boxeadores que han dado … Sigue leyendo Mi compañero de aventuras